La crisis de Silicon Valley Bank (SVB) está expandiendo y contagiando los mercados financieros.
El origen fue una importante salida de depósitos que obligó al banco a vender una cartera de bonos con importantes pérdidas. Ello acarreó caídas del 60% en la cotización de las acciones de la compañía derivando también en significativas bajadas del sector financiero en general.
El impacto de la noticia generó en un primer momento y como es normal volatilidad en los mercados ya que conlleva incertidumbre, Pero un análisis más detallado nos muestra que:
– El modelo de negocio de SVB estaba centrado en el sector tecnológico y cripto con el 90% de sus clientes sesgados al venture capital y a las start ups. Ante las quiebras recientes de FTX y otras plataformas y bancos vinculados al sector tecnológico, estos clientes necesitaban hacer uso de sus depósitos ante una financiación que se está agotando.
– La gestión de la cartera de bonos de SVB y su posterior venta no fue la más adecuada.
– Peter Thiele, uno de los advisors más famosos de Venture Capital en EEUU, tampoco ayudó sugiriendo sacar el dinero de SVP.
– Según normativa norteamericana, su tamaño de 200 mil Millones de USD estaba justo por debajo del umbral del límite de la Reserva Federal de 250 mil Millones USD por lo que le eximía de cumplir ciertas ratios exigidos por Basilea 3. Como no cumplía las ratios apelaba a depósitos y no al mercado de capitales. Si hubiera estado bajo normativa tampoco hubiera habido el mismatch entre duración activos y pasivos.
– Por último, su loan to deposit rate de 110% era de los más elevados del sector.
Por lo que creemos que una vez descontada la noticia:
– Sí tendrá un impacto colateral en el resto de bancos regionales norteamericanos exentos de cumplir la normativa anteriormente comentada pero no el resto. De ello se beneficiarán los grandes bancos (que sí cumplen las métricas) y la deuda pública norteamericana (activo refugio y con buena rentabilidad). Añadir que en Europa los bancos ya tienen posiciones de capital muy sólidas y están diversificados.
– Ante la posibilidad de contagio, tanto el Banco Central Europeo como la Reserva Federal norteamericana, tienen herramientas para apoyar financieramente, si fuera necesario, este riesgo de salida de depósitos. Consiguiendo así que un problema de liquidez no se convierta en un problema de solvencia.
A fecha actual las autoridades estadounidenses han comunicado que garantizan el acceso de los depositantes a su dinero. Así se evitará un contagio hacia otras entidades y se reducirá el riesgo de salidas masivas de depósitos. Además de cualquier problema de liquidez y solvencia en el sector tecnológico ante sus necesidades de financiación. Esta rápida reacción de las autoridades norteamericanas dando liquidez, ha devuelto en parte la confianza al sector financiero y a los depositantes.
Para acabar, comentar que el problema de fondo es el impacto que están teniendo las abruptas subidas de tipos de interés y la política monetaria restrictiva aplicada por lo que deberemos estar atentos a las consecuencias que puedan irse derivando.
Es por ello que actualmente tenemos las carteras con la mínima exposición a Renta Variable y máxima exposición a Renta Fija. En nuestras carteras no tenemos exposición directa a ningún banco regional norteamericano.