Fecha
11 octubre 2022

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Los 4 riesgos a los que nos enfrentamos este trimestre

 “¿Qué es real? ¿Cómo defines lo real? Si estás hablando de lo que puedes sentir, lo que puedes oler, lo que puedes saborear y ver, entonces lo real son simplemente señales eléctricas interpretadas por tu cerebro.”

Estas son las palabras que utilizaban en la película “The Matrix” para explicar al espectador cómo interpreta nuestro cerebro la realidad que nos rodea. Dicha interpretación efectuada por millones de personas puede derivar en distintas realidades que conviven en el mismo momento, distintos cerebros interpretando de forma distinta toda la información recibida y evaluando una situación de múltiples formas.

Si esta idea la trasladamos a los mercados financieros llegamos a una conclusión, el corto plazo de un sistema económico es imposible de predecir porqué el hecho de convivir en realidades múltiples provoca que el mercado se comporte de manera irracional.

En las ciencias exactas, como puede ser la física, todo se reduce a la causalidad, causa y efecto, es decir, si se produce un suceso A, entonces el suceso B pasará seguro. Muy distinto ocurre en las finanzas, donde las emociones, producidas por distintas percepciones de la realidad, producen diferentes resultados cada vez que se da un suceso A, pudiendo desencadenar un suceso B, C, D o F en función de las variables X, Y o Z.

Para que un mercado fuera eficiente debería respetar el principio de la causalidad y rara vez, en el corto plazo, se cumple dicho principio.

No podemos predecir el futuro, pero nos podemos preparar y esta es sin duda es uno de los principales pilares de Ginvest porque, aunque no sepamos que va a ocurrir en el corto plazo podemos estar preparados para afrontar cualquier impacto que se pueda producir, de ahí la importancia de realizar un buen análisis para cubrir todas las posibilidades.

Actualmente se puede entender que desde la perspectiva de un inversor se vea un panorama complejo, es por esto que a continuación les queremos detallar cuáles son los cuatro principales riesgos que en Ginvest creemos que pueden tener especial relevancia en el próximo trimestre y cómo se prepara nuestro equipo de gestión para paliar los efectos que estos puedan tener sobre los fondos y las carteras de nuestros co-inversores.

1. Inflación y tipos de interés

Sin duda una inflación que se mantendrá elevada es uno de los principales riesgos que prevemos para el próximo trimestre ya que en los últimos datos publicados esta ha salido por encima de lo esperado, obligando a los principales bancos centrales a acelerar las subidas de los tipos de interés. Actualmente el IPC interanual de la zona Euro se sitúa en el 9.1% y el de Estados Unidos en el 8.3%.

En Ginvest, somos conscientes de que una elevada inflación y consecuentemente una subida de tipos de interés por parte de los bancos centrales, implica menor crecimiento y un impacto importante en la renta familiar y empresarial.

Incluso la reserva federal dice que no prevé que la inflación baje del 2% hasta 2025, esto significa que debemos tener una cartera muy preparada para un periodo largo de inflación elevada.

Ante esta perspectiva, en la renta variable, lo que hacemos es dotar la cartera con fondos de empresas que tengan poder de fijación de precios en el mercado para que puedan trasladar la subida de precios al consumidor. Además, destinamos una parte de la cartera a sectores estructurales como el sector salud, el cual históricamente ha demostrado un buen comportamiento en periodos de inestabilidad.

Por la parte de renta fija seguimos centrados en bajas duraciones y en activos de alta calidad crediticia, sin embargo, visto la escalada de tipos que ya descuenta el mercado, hemos iniciado una rotación a duraciones mayores. Comentar también, que hemos incorporado una pequeña parte de bonos ligados a la inflación.

2. Conflicto bélico Rusia Ucrania

La guerra está afectando sobre todo al viejo continente europeo y todos nos hacemos la misma pregunta, ¿Cuánto durará?

Nadie lo puede saber. Fíjense ustedes que una guerra se trata de un factor no incluido en ningún modelo económico y el péndulo puede girar en cualquier momento en cualquier dirección.

A raíz del conflicto bélico se ha comprobado el problema que tiene Europa con la transición energética. El continente todavía es muy dependiente de los combustibles fósiles los cuales una gran parte son suministrados por Rusia y al estallar la guerra se ha demostrado que aún no estamos preparados para escalar toda la producción actual a energías verdes/renovables. Por este motivo hemos visto un gran incremento en el precio de la luz y del gas en los últimos meses.

Aunque el incremento del precio de la energía afecta por igual a todo el continente, vemos que a nivel empresarial de momento el impacto ha sido mayor en los países de la zona Norte, ya que los de sur, como en España, Italia, Portugal o Grecia han disfrutado de un gran verano en términos turísticos.

Para paliar dichos efectos en Ginvest a nivel estratégico hemos infra ponderado nuestro vértice europeo versus el resto de los vértices, ya que como he dicho creemos que será la zona más afectada por la guerra.

En segundo lugar, a nivel de selección de activos, sobre ponderamos los fondos de energía renovables, los cuales creemos que se verán beneficiados de dicha transición energética.

En último lugar, la parte que reducimos de Europa la diversificamos de manera táctica abriendo posición en un fondo australiano con un sesgo en materias primas, lo que aporta descorrelación a la cartera y nos permite aprovechar el incremento de precio de las materias primas.

3. Ralentización Económica Global

De momento vemos que la demanda global se mantiene estable y los últimos beneficios empresariales continúan creciendo. Sin embargo, vemos algunos indicadores que están descontando una pequeña contracción en la actividad empresarial. Esto podría desembocar en una recesión en la parte de Europa, motivo por el cual también la hemos infra ponderado, no obstante, en la parte americana que es una de nuestras principales posiciones, actualmente solo prevemos una pequeña ralentización.

A pesar de todo, para sacar unas conclusiones exactas debemos esperar a ver el crecimiento de los próximos beneficios empresariales.

Con el fin de prevenir, hemos diversificado la cartera incrementando la parte defensiva, fondos de empresas de productos básicos que se comportan mucho mejor en momentos de recesión y se han incrementado las empresas de elevada calidad.

Por otra parte, mantenemos una elevada exposición a las empresas de inteligencia artificial, ya que creemos que en caso de que las empresas hagan recortes se aprovecharán de dichas tecnologías para suplir los recortes de personal.

Por último, en la parte americana incrementamos los fondos de empresas que se verán muy beneficiadas de las subidas de tipos y de las políticas de Joe Biden, que beneficia a todas aquellas empresas que quieran hacer una transición energética.

4. Incremento de tensión geopolítica global

En los últimos meses hemos visto cómo las tensiones geopolíticas han ido en aumento de forma global, hasta el punto de que debemos considerarlas como un posible riesgo de nuestras carteras.

Por citar algún ejemplo actualmente tenemos el problema con la Independencia de Taiwán, donde China considera que el territorio es simplemente una región más de su país y exige la unificación, pero en cambio EEUU quiere que la isla tenga un estatus propio. ¿Pero por qué tanto interés por Taiwán? En esta pequeña isla se fabrican la mitad de todos los semiconductores del mundo, uno de los motivos por los cuales es muy importante a nivel estratégico y comercial.

No obstante, China sigue con su estrategia Covid cero (confinamientos y cierres de fábricas) y este efecto se traslada a otros países del sureste asiático, lo que repercute de forma directa en occidente en escasez de materias primas y precios de alimentos básicos disparados. Por poner un ejemplo, en lo que va de año la leche, los huevos y la harina han subido un 20%.

Sin embargo, esto afecta de forma negativa a China, ya que muchas empresas, a causa de continuos cortes en las cadenas de suministros, están deslocalizando la producción a otros países como Vietnam y/o India.

Ginvest, para proteger a nuestros co-inversores de dichos impactos, emplea dos estrategias.

La primera se basa en la diversificación en los mercados emergentes, pese a que ya no teníamos China desde un momento inicial, nos posicionamos hacia la diversificación en otros países como pueden ser India o Vietnam donde a día de hoy aún se mantienen las políticas fiscales expansivas y se aprovechan de la deslocalización de empresas de China como hemos comentado.

En segundo lugar, buscamos fondos con sesgo en materias primas para aprovechar los repuntes de precios comentados.

Conclusiones

Estos son los principales riesgos que desde Ginvest creemos que pueden afectar a los mercados de cara al último trimestre del año, no obstante, tenemos la esperanza de que alguno de ellos, especialmente el del conflicto bélico, pueda verse solventado lo antes posible.

Para acabar, en Ginvest como solemos recordar las palabras de Séneca: ”ningún viento es favorable para aquel que no sabe a qué puerto se dirige”,  por esto importante tener claros nuestros objetivos y prepararnos para cualquier situación de mercado que se nos presente.

Fecha
11 octubre 2022

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